Viajando como una pluma: Puesta de sol en el Templo Tanah Lot, Bali

Viajando como una pluma

13 de julio de 2013

Puesta de sol en el Templo Tanah Lot, Bali

Otra puesta de sol que me fascinó, que te cautiva y te hechiza... te transporta al más allá, eres pura consciencia de tu existencia!

Templo Tanah Lot

Significado: Tierra en medio del Mar.

Este pequeño Templo está construido en una gran roca y se puede acceder a él a pie, pero en cuanto sube la marea, queda aislado, dándole el aspecto de una isla.

Hemos tenido la suerte de llegar a las 16h y la marea estaba baja, así que hemos podido cruzar y llegar hasta el Templo. Al llegar, nos ha sorprendido que de su interior brota un manantial de agua dulce, increíble. Un grupo de hombres, que se encargan de cuidar el lugar y de ayudarte a cruzar, ya que las corrientes son fuertes y no dejas de caminar por entre las rocas, por un pequeño donativo te bendicen con el agua, que para ellos, es sagrada. Te colocan unos granitos de arroz en la frente, no sé muy bien el significado, y te colocan una flor detrás de la oreja. Es como un pequeño ritual!

Se dice, que fue construido en el S.XV por un sacerdote, que al ver esta gran formación rocosa consideró que era un lugar sagrado, idóneo para rezar a los Dioses.

La verdad es que lo ves ahí, solitario, con esa vegetación, rodeado por la profundidad del océano, con las olas golpeando con fuerza sus paredes y esa puesta de sol… y los ojos se te iluminan, no puedes casi ni parpadear… es algo que te atrapa, no puedes dejar de contemplarlo e imaginarte cómo serían las ceremonias en esa época… bufff!!

El momento más esperado, al atardecer para contemplar un espectáculo increíble, mágico: su puesta de sol.

No podemos evitar quedarnos aquí, sentados en una terraza con una cervecita, a la espera de la caída del crepúsculo, contemplando este maravilloso espectáculo. Es una sensación difícil de explicar. Un contraste de rojos van impregnando de color el cielo y el Templo, majestuoso, sólo permite distinguir su silueta negra… qué mágico, de verdad… Qué emoción!

Comienzan a fluir todas esas sensaciones en tu interior, vuelve a ti esa Paz, ese sentimiento de satisfacción, Feliz por estar ahí presenciándolo… y conectas de nuevo con tu Ser y eres pura espiritualidad!